EL PRESENTE EN FEMENINO.


Los datos no son alentadores. Y ante ellos, lo que no puedo es sentir el optimismo. Sólo un 26´8% de mujeres ocupa puestos medios de dirección, y sólo hay un 11´7% de directivas. De los 502 consejeros de empresas del Ibex 35, sólo 54 son mujeres. Sigue a día de hoy, habiendo una diferencia de sueldos entre hombres y mujeres que según diferentes organismos ronda entre el 12 y el 17%. El obejtivo marcado para 2010 una tasa de empleo femenino que sobrepasase el 60%, en 2011 se cuenta que estamos en el 52´6%, mientras que el de los varones está en un 67´7%.



El consuelo es que vamos avanzando, aunque es más que evidente que la mochila con la que cargamoses pesada. Que accedemos a más esferas reduciendo considerablemente otros espacios y que si llegamos a más, no es porque tengamos que asumir menos; asumimos lo mismo, pero con una gestión del tiempo impecable, una creatividad creciente y un optimismo implacable. El tiempo es milimétricamente aprovechado, seccionado y amortizado. Claro que esto tiene su precio; agotamiento vital.

Me cabreo cada vez que se habla de conciliación laboral y profesional. La legislación que procura consolidar esa conciliación me parece corta, demagógica e irreal. Es una falsedad más con la que los políticos se llenan la boca. Sé exactamente qué cosas he tenido que dejar para poder estar al lado de quien necesita que esté.

La ley de dependencia me parece otra farsa más candente aún; que no te veas con un problema de dependencia, porque ese será para tí solita. Todo son palabras, leyes y conceptos que no tienen dimensión práctica. Las ayudas a las familias numerosas son irrisorias en relación al esfuerzo económico y emocional que supone sacar esa familia adelante; y quien trabaja para ello suele ser siempre ella. Da igual que esté casada, separada, divorciada o viuda. Siempre estará detrás ella, salvo contadas excepciones.
El respeto de las cuotas sólo me parece un embudo por el que se van a colar personas con una trayectoria y formación profesional inadecuada al puesto que ejercen. Personas  que no son las mejores cualificadas para la labor que se les encomienda, y que pudieran acceder a ese puesto por encima de quien está mejor preparado, y lo hacen por el simple hecho de que es una mujer. Leire Pajín  ha comentado alguna vez que no debemos dejarnos engañar. Que las mujeres no debemos permitir dejarnos ningunear por algunas trampas, entre ellas, la de pensar que si estamos en un puesto es porque hay una cuota establecida que han de ocupar necesariamente las mujeres (¡!) Precisamente ella, habla.

Le quisiera poder decir a la señora ministra que  es lamentable que por ser mujeres nos tengan que regalar un puesto sin la acreditación de la mejor capacidad curricular para ello. Aunque bueno, a ella le ha venido que ni pintado el asunto. Le quisiera explicar que esa obligación de las cuotas, ya nos coloca desde el principio en una desigualdad además de evidente, bochornosa. Que nunca, nuestra capacidad, nuestra formación y nuestro desarrollo curricular pueda pasar de largo si no es el adecuado. Que no debemos acceder a un puesto sin más miramiento ni competencia que la de nuestra condición de mujeres, y nunca desde luego, por encima de currículos, trayectorias profesionales y capacidades más competentes. ¿Sería eso vivir en la igualdad? No, no lo sería. No me gustan las cuotas. Tampoco me gusta que me regalen nada, ni me gustan los privilegios. Tampoco que me lo pongan más difícil, que es a lo que estamos más que acostumbradas. Lo único a lo que aspiro es al reonocimiento exacto que se merece mi valía; ni más ni menos. Aspiro y aspiraré siempre al reconocimiento justo de mis capacidades, y a la igualdad de género en cada premisa que se establezca en cuanto a mi posibilidad laboral como mujer.

Vivir en la igualdad sería poder acceder a la vida laboral en las mismas condiciones con las que lo hace un hombre. Poder abordar un horario laboral flexible que permita cimbrear sobre las diferentes etapas que conlleva sacar una familia adelante, ayudar a unos padres ya mayores, y que no se nos mire como un problema cada vez que paseamos con un lucido bombo (ese bebé portátil que un día no lo será). Poder acceder a las mismas oportunidades de formación, proyección laboral y condiciones económicas ante un puesto laboral. No digo ya lo que puede ser, o cómo te las puedes ver, si el día a día laboral se une a una familia que tiene como reto una  enfermedad seria o una limitación y dependencia crónica de alguno de sus componentes. El reto es de un calado ya tan hondo, que una simple respuesta institucional y legal no sirve, para nada sirve, si es que la hubiera. Y a día de hoy, no la hay. Y casi siempre, las cargas especiales las solucionan y gestionan ellas.

Nos  toca casi siempre elegir a nosotras. O estás para esas personas que quieres, o desarrollas íntegramente tu proyección profesional, aquello para lo que sabes has nacido y quieres hacer. Eliges. Y sabes que alguna de las dos facetas  se resentirá. La parte de olvido que se queda pendiente, a la espera, o simplemente sin realizar, siempre va a ser una mochila con la que habrás de cargar. El equilibrio es complejo, difícil y en ocasiones contadas logrado. No puedo más que reír ante algunas personas que, líderes de esa conciliación, hablan, hablan, y hablan... pero ellas no han educado a sus hijos. A sus cuatro o cinco hijos, para más inri. Sus hijos han estado con otras personas mientras ellas hablaban, así que por favor, menos frivolidad. Para míl la superwiman, es aquella mujer que sabe de sus limitaciones, y que las intenta solucionar de la manera más honesta y eficaz. Aquella que es conscientes de lo que elige, y que lo hace valientemente, y con la intención de resolver de la forma más adecuada sus limitaciones. Da igual qué opción salga más reforzada, sea esta la profesional o la familiar, sólo la valentía de elegir tiene ya mucho mérito. En general, estas mujeres no van de ideales, ni de competitivas ni de "geniales". Simplemente son y saben del riesgo que supone tomar una opción y luchar por ella sin sentirse ni mejor ni peor que la opción contraria.

La ayuda institucional bajo mi punto de vista no es el punto clave, aunque sí necesario, en todo este entramdo de la conciliación laboral y familiar. La clave es la cultura; todo ese contenido y entramado de valores que asiste a nuestra forma de mirar el mundo, ese entendimiento que nos hace elaborar una manera de afrontarlo. Ese mundo que atendemos las mujeres, esa esfera de la que normalmente se desentienden los hombres. Jamás he entendido que la familia sea un proyecto exclusivamente femenino; la apología de la maternidad como principal fuente de satisfacción, la educación que ve a la madre como eje familiar y se olvida del padre. Si hay algo más que evidente, es que una familia es siempre cosa de dos. Y por ello la clave fundamental no está en las cuotas, en querer ser una superwoman, ni en pensar que el equilibrio de tu familia depende sólo de tí. El equilibrio está en el ejercicio de conceptos que han de ser bien entendidos. El reto está en poder establecer la igualdad dentro del propio nucleo familiar. Evitar ese desentendimiento que los hombres practican ante las "cosas de casa", esa actitud tantas veces promovida por las propias mujeres para poder sentirse y hacer sentir que ellas son la sal y pimienta de toda familia. Lo único que pondrán en evidencia con ellos es que son personas vacías. La igualdad comienza en casa.

La clave esencial está en esos hombres que se dicen compañeros pero que se escaquean cuando la cosa se pone parda, también en esa sociedad económica que nos ve sólo como sujetos de producción y nunca como personas ante un derecho y obligación generacional. Las mujeres de hoy, con una edad comprendida entre los 40 y los 50 años somos la generación bisagra; esa que coordina, gestiona y genera el bienestar entre la generación anterior y la que será futura. Hoy las mujeres  llevamos todo el peso  del compromiso familiar y social además de nuestro necesario y posible ejercicio laboral a veces en una condiciones más que estresantes.

El punto álgido está en ellos; en su evolución como personas, como padres de familia, como co-gestores de una unidad familiar. Y a ustedes señores políticos, les corresponde hacer posible la mejor de las circunstancias de igualdad; regular los salarios desiguales en labores iguales, desarrollar proyectos par la ayuda social, lograr una infraestrucutra de guarderías y de centros para mayores asequible, pero no nos vengan con milongas del tipo "nosotras lo valemos" o que  "nadie nos ha regalado nada" (cuando si estoy quizá en un pueso relevante es por la obligación de cumplir cuotas). Eso sólo son gestos de prepotencia, nada más. Tiene que haber una proyección práctica de mayor evidencia, tanto en el aspecto económico, como en el  social y cultural. Nuestro Estado de Bienestar está demostrando a día de hoy no ser efectivo ante la más que constatable y horrorosa realidad de la violencia de género; 18 mujeres han muerto en lo que va de años a mano de sus parejas o ex parejas. Así que por favor, cuantas menos milongas mejor. Algunas noticias nos muestran que ser mujer en algunas circunstancias es aún mucho más trágico.

Pienso honestamente que el éxito real está en toda una revolución cultural y emocional,  en cada ciudadano, en cada núcleo familiar.  El éxito y la presencia de una mujer se notará siempre que un señor decida que su familia, también es cosa suya. Porque la verdadera revolución que se necesita es precisamente esa; la interna. Que la mayoría de padres decidan dejar parte del tiempo que dedican a las cosas que les gusta para dedicarlo a su familia. Si tu estás dentro, ella podrá estar fuera y desarrollar aquello para lo que también ha nacido. No hay otra. La clave está y reside, fundamentalmente, en ellos.

UNA PELÍCULA.







Los personajes son los habitantes de un pueblecito del Kurdistán iraquí, en la frontera entre Irán y Turquía. Buscan información vía satélite sobre la guerra que se les avecina; el inminente ataque de los Estados Unidos contra Irak. No entienden ni el idioma ni las imágenes mostradas por televisión. Finalmente la información les llega de un chico mutilado, que viene de otro pueblo con su hermana y el hijo de ésta. La guerra cada vez está más cerca. Mientras la vida en el campo de refugiados continúa, los niños sobreviven gracias a la venta de minas antipersonal que abundan en la zona.

La película es una denuncia del sufrimiento que toda guerra es, una denuncia sobre la industria armamentística; especialmente hace incisión en la venta de minas anti-persona por parte de EEUU y Europa a Irak. El Kurdistán está sembrada de minas. La película también quiere ser una evidencia de las secuelas que permanecen años después de que se haya producido.  Ahora el interés está en otras guerras, en otros escenarios. El pasado en muchos escenarios del mundo es amargo, el presente también, y el porvenir no depende nunca de uno mismo. Los poderosos extranjeros nunca han tenido la intención de crear un paraíso para nadie, salvo para sí mismos. Esta es, creo, la lección que podemos intuir. Magnífica.





"Mi intención fundamental era hacer un alegato contra la violencia. No solo sobre sus consecuencias directas, sino también sobre las secuelas que permanecen años después de que se haya producido."

"Retrato a una generación cuyas expectativas se han visto defraudadas. Están atrapados entre dos tipos de barbarie. Primero, fueron víctimas de Sadam Hussein. Después, la entrada de los americanos les condujo a un nivel de terror diferente".

Bahman Ghobadi. Guionista y director.

 

Los niños son siempre las víctimas de una guerra.

LO QUE ESTÁ POR LLEGAR.



Más paro, aumento de los tipos de interés y  menor crecimiento; éstas son las nuevas previsiones macroeconómicas del gobierno. En la macroeconomía, en el estudio del funcionamiento de la economía en su conjunto, el individuo como unidad económica no se percibe, las previsiones manejan cifras en las que nuestra intervención es imposible, aunque sus consecuencias den directamente en la línea de flotación de la economía de nuestra casa. Nosotros, como ciudadanos, hemos de estar a verlas venir, vengan como vengan, y a soportar estoicamente lo que nos caiga.

Supongo, que cuando se habla de todas estas variables macroeconómicas con normalidad, es  además de porque entiendes, porque no te afecta directamente; que su variabilidad no te ponen en el punto de mira ni el bolsillo al aire.

Me gustaría saber por ejemplo qué siente la Vicepresidenta Económica cuando una vez conocido el panorama económico, y una vez estudiado, nos lo cuenta y llega su final de día; qué piensa exactamente cuando se va a dormir. Si sabe o se llega a imaginar en algún momento lo que es una economía doméstica nula. Yo tampoco lo sé a día de hoy, soy afortunada. No sé lo que es no poder dar a tus hijos lo que necesitan, pero confieso que alguna vez he pensado en ello; como los demás, soy un sujeto potencial de semejante tesitura.

La realidad es que a las economías domésticas y a las empresas, no nos queda otra que quedarnos a verlas venir.  Y desde mi cabreo existencial, a la única conclusión a la que llego, tode sea dicho, desde mi ignorancia, es a la de que la vida económica es pura incertidumbre. No digamos ya de lo que llega a ser la economía de mano de estos políticos que nos rodean. Y no tiene menos peso constatar que esa incertidumbre, cuando tratas de llevar a una familia a buen puerto, es una compañera que además de desesperante, es muy angustiosa.  ¿Es este pensamiento también puro populismo, simple demagogia, Sra Ministra? ¿Usted lo creería así?

Quisiera saber si este nivel de incertidumbre pudiera haber sido evitado con un poco más de empeño, previsión y ganas de gobernar, si haciendo lo que había que hacer bastante antes, hubiéramos podido estar en un nivel menos angustioso económicamente hablando. Si al gobernar, al determinar lo que necesariamente se ha de hacer, y ejecutarlo, no se mirara el recorte de votos electorales que ello supondría.  Es sabido que en la vida, si no miras de frente los problemas que te vienen, al final te los comes igual, pero más inflados, más avinagrados y con menos posibilidades de éxito. Y ello siempre con un coste mayor. Da igual si el problema es económico o existencial. O lo miras de frente, o se te sube a la chepa y ya no te lo puedes quitar. Claro que en este caso, quien la paga, no es quien la caga (perdón). En este caso la pagamos los ciudadanos de a pie, es decir, todos aquellos representados. Los representantes ya han blindado más que mejor sus propias unidades económicas familiares.

Es curioso observar cómo la opinión de los economístas y la de los representantes del gobierno, pocas veces coinciden. ¿Por qué normalmente no ocurre? No digamos ya las opiniones de la oposición frente a las del gobierno; hablando de la misma realidad parece que estuvieran en diferente galaxia.  Eso denota absolutamente una manipulación vergonzosa por ambos lados. Para mí que las leyes de la economía se las pasan ambos por el mismísimo arco del triunfo.

El paro, asegura la Vicepresidenta Económica, no superará los 5 millones. Los economistas por otro lado comentan que hasta el 2014 el paro no empecezará a tener un descenso considerable. La tasa de crecimiento del desempleo se estima en un 19´8%, se piensa que no sobrepasará el 20%, pero ya suenan datos de que puede estar en el 20´5%.  ¿Es posible entonces que el paro no supere a los 5 millones hasta ese 2014 cuando a día de hoy el número de parados es de 4.696.600 personas? ¿De verdad puede uno creeerse esto?  El gobierno asegura que la disminución del desempleo se empezará a notar mucho antes del 2014,  y dan como fecha el final de este año. Sinceramente, ojalá pudiéramos creerlo. La tasa de paro es una lacra angustiosa que necesariamente ha de ser solventada.

La destrucción de empleo y las nueva incorporación de personas a la demanda de empleo nos ponen ante una tesitura complicada y en mi opinión, en absoluto solventable y generadora de certidumbres a corto plazo. Nos hallamos en la cuerda floja de la economía. Y siguen las dudas. ¿Cómo fluctuará el empleo? ¿Cuándo se podrá hablar de un aumento de la oferta laboral? ¿Se puede crear empleo en las condiciones y circunstancias económicas a las que nos enfrentamos? Se habla de oscilaciones estacionales durante todo el 2011, y se constata que el crecimiento neto de empleo empezará a notarse en el 2012. Nos queda, si esto es cierto, todo un año con sus 365 días en la incertidumbre de lo que le va a acontecer a nuestros bolsillos. ¿y será posible que sólo sea durante un año con los datos que están cayendo?

El aumento del paro, unido a la subida del precio del petróleo, a la subida de los tipos de interés, y a otras no minimizadas subidas en gastos básicos, nos mantienen además de escépticos, con la moral por los suelos y por qué no decirlo "acojonados". El gobierno en cuestión de petróleo vuelve a ser optimista, pero la cuestión primordial es si el gobierno está siendo realista. ¿Es real todo esto que nos cuentan? Lo cierto es que los datos de unos y de otros no concuerdan, y así,  cuán difícil es oír alguna conclusión honesta. En economía, los profesionales no hablan más que de la palabra incertidumbre, y lo que el ciudadano sabe es que esa realidad que hoy es la incertidumbre en las familias se puede llegar a convertir en toda una crisis existencial, y toda una ausencia de futuro.

Escucho todos estos datos con preocupación y escepticismo, y no quiero pensar lo puede ser oírlos cuando  el paro afecta a todas las personas activas de una familia. Si a todo esto, le uno los datos descubiertos tan sólo en estos días, sobre la corrupción política que se da en nuestro país, el cabreo se vuelve indescifrable. Y me pregunto si realmente nos merecemos esta clase política, ¿de verdad que nos la merecemos?

Y sí, Señora Ministra, ustedes deben ser los primeros en dar ejemplo. No me diga que es cuestión de forma, o que se trata de un simple populismo, cuando se les pide a ustedes que empiecen a recortar gastos. Porque si no es cuestión de fomas y sólo lo es de fondo, el fondo que ustedes manejan es impresionante. Porque va a ser que sí, que los pequeños gestos de ustedes, pueden hacernos ahorrar pero que mucho dinero. Que con lo que cada uno de ustedes gastan al día en dietas, bien podría comer una familia normal durante... ¿un año? Como representantes políticos, les pediría por favor que bajen un poco a la esfera económica de la ciudadanía a la que representan, a la que gobiernan, y de la que día sí y día también, ustedes se ríen a la cara.

Señores políticos, si ustedes decidieran aterrizar en la realidad, si fueran conscientes del día a día de muchos de los ciudadanos a los que representan, quizá se vieran empujados a gobernar honestamente. No quiero pensar en los efectos que tendria si su vocación real  fuera la de gobernar para el beneficio de la sociedad, y no para su propio lucro y/o el beneficio de su mismísima familia y amigos. No quiero pensarlo porque si lo hago, ahora mismo me subiría la tensión enormemente por comprobar el país tan enormemente solvente que seríamos si ustedes no robasen tanto y pretendieran ser lo que son, un ciudadano más. Sinceramente, son ustedes una clase política lamentable.




MÚSICA EN DOMINGO.

 ... hoy no me apetece tocar el mundo. Me retraigo y me quedo en la música. Silencio.


USO PERJUDICIAL DEL ESPAÑOL

(... o el humor en un domingo relajado)

Juan Gómez Pérez, consultor de "Prais Guaterjáus an Cúper" (P.G.A.C.), fue detenido ayer en las oficinas de esta empresa por «desafiar a los directivos, al utilizar en repetidas ocasiones un correctísimo español en su labor profesional», según consta en la denuncia presentada en la comisaría madrileña de la calle de la Luna.

El detenido, según los testigos, habría provocado diversas escenas de terror lingüístico entre sus compañeros. Los problemas comenzaron en abril, cuando Gómez Pérez llegó a la empresa e insistió en poner Jefe de producto en su tarjeta de visita, en lugar del "Product Manager", que aparecía en la de sus compañeros.

_Desde el primer día nos extrañó su actitud_ comentó Francisco de Borja Acebo-Guindaleda y Álvarez de Las Asturias, Account Manager (director de cuentas) de PGAC _pero nunca creímos que fuera a reaccionar con la violencia verbal con que se despachó después._

Un mes más tarde, durante la presentación del catálogo comercial, Gómez Pérez proyectó sobre una pantalla varias láminas que mostraban rótulos escritos en un perfecto castellano, mientras comentaba en voz alta los gráficos y cifras de la empresa en un discurso totalmente desprovisto de anglicismos.

Ante los ojos de sus compañeros, «horrorizados» según su propio testimonio, desfilaron varias decenas de frases escritas en la lengua de Cervantes sin que el consultor mostrara ningún pudor o vergüenza por lo que estaba haciendo. _El catálogo de la empresa había sido traducido y, por lo tanto, manipulado_ aseguró el Managing Director (director general), Juan Jacobo O´Callaghan García-Carrizosa de Fontejudo, _este sujeto había sustituido todos los markets, targets, inputs, slides y sponsors... por mercados, objetivos, entradas, diapositivas y patrocinadores y otros varios que fueron apareciendo.

El resultado fue que no se entendió nada de la presentación, provocando el desconcierto general. Además, y según consta en la denuncia, el detenido habría cambiado las palabras outsourcing, finances y transactions por subcontratas, finanzas y transacciones. _Y se había quedado tan ancho; hasta ahí podríamos llegar,_ comentó indignado el responsable de PGC.

Gómez Pérez no pudo terminar su presentación, pues fue reducido y maniatado por dos compañeros de la empresa _el Phone&Door Manager (recepcionista) y el Security Surveillance Officer (vigilante jurado)_ hasta la llegada de la policía municipal que puso al consultor a disposición judicial. _Lo ha hecho para provocar_ comentaba ayer Ramón María Antúnez de Biedma y Fernández-Malvarrosa, refiriéndose a la actitud de Gómez Pérez.

_ ¿Quién se cree que es?, ¿un Vicepresident (subdirector)? No se puede ser tan hortera_ concluyó el Manager's Ball (pelota del director). Debe tratarse de un morning-singer de three to the quarter.


STANISLAW LEM.







"En general podemos ennoblecer una obra o tacharla de superficial, dependiendo del telón de fondo que le otorguemos en el escenario de nuestra mente como lector." Stanislaw Lem.


La lectura del sábado siempre es un placer. Hoy os propongo dos libros; son un acicate para la reflexión. Una posibilidad para el entendimiento del kaos. El recuerdo de lo que el hombre fue, es y puede llegar a ser. Es una vuelta al pasado que bien pudiera ser intuición del furuto, pero este descubrimiento le pertenece al lector. El cable suelto de la narración de Lem está ahí. La decisión de cogerlo o no es del lector, también la sorpresa de su descubrimiento y la congoja por lo narrado.



¿Recuerdas el inventario de cosas misteriosas que los liliputienses encontraron en los bolsillos de Gulliver? Entre ellas había un peine que podía usarse de valla, un enorme reloj de bolsillo que emitía un molesto sonido a intervalos regulares, y muchos otros objetos de uso oscuro. Una vez yo también fui liliputiense.


El castillo alto, rememora la biografía del autor que contada por sí mismo, pasa sin recelo por todas sus esquinas, las amables y las menos amables, las comprendidas y las que a día de hoy, han quedado por comprender. La biografía es un todo no terminado, pero es cierto que el niño que fuimos, siempre estará ahí. El libro es de expresión íntima, un original testimonio del que ha sido considerado uno de los genios literarios del s.XX.

Es un recorrido por los sucesos que la memoria recoge como tesoros aunque el autor no comprenda muy bien por qué, qué es lo que hay de extraordianario en dicho suceso para que la memoria lo guardase tan sigilosamente. Misteriosa la memoria, siempre recogerá aquello vital, aunque nunca lo lleguemos a entender muy bien.

La infancia, ese espacio sin desentrañar, lleno de misterio, de interrogaciones y de datos a veces inconexos. De ahí, que pongamos un gran empeño por lograr la veracidad, la precisión, un ir más allá desde la simple interpretación de los hechos. La objetividad de nuestra infancia no se separa de la interpretación; a la vez que contamos aquello que no sabemos muy bien por qué guardamos, lo interpretamos. Las palabras que usamos, nuestra sintaxis y gramática, son interpretación. Como bien explica Lem: Uno ve al niño que fue a través de unas gafas colocadas sobre su nariz por todos los años que transcurrieron, y no hay remedio. No podemos evitar que la memoria deje de ser lo que es, un misterio, como también es, ese reflejo necesario de nuestra vida, al que a veces necesitamos regresar.



"Desnudos morían los más indefensos; los ancianos, las mujeres, los inválidos, los niños. Desnudos, tal y como nacieron, caían al barro. El asesinato sustituía aquí a la vez a la jurisprudencia y al amor. El verdugo se presentaba ante la nultitud de la gente desnuda que se preparaba a morir, medio padre, medio amante."


Provocación es un libro que nos vapulea, que no nos deja indiferentes.

Una primera parte indaga en la explicación imposible de un hecho, el holocausto judío; Der Völkermord. Disecciona ese ser oscuro, abismal e impasible que es el ser humano. ¿Hay de verdad razones que den una explicación honesta? La insensibilidad como explicación es la verdad que precede a nuestra historia. Si tú lector, eres capaz de intuir esa capacidad del hombre para usar los razonamientos del bien con el objetivo de llegar al mal, a la crueldad y al daño sobre los otros, entenderás que este no es un análisis estricto del holocausto, que no se basa en datos, sino en lo demente que la actitud del ser humano puede llegar a ser. No debe incitar su lectura el hallazgo de datos desoladores, cifras o hechos históricos, sino la necesidad de comprender que las razones del ser humano a veces son insondables, incomprensibles y totalmente infernales.

En  un segundo capítulo estamos frente al mundo de hoy, ante la grotesca estadística que son los actos del hombre, la humanidad se traduce en números y refleja su mundo como una  autopista interminable de conocimiento, de datos acumulados estadísticamente en los que el hombre se pierde, en que la persona deja de existir. ¿Dónde está el ser humano? ¿Qué emociones, interpretación y acción son el efecto de todo ese cúmulo de datos y estadísticas que son la información actual? ¿Es posible encontrar al ser humano ante toda esa vorágine de datos, es posible la acción humana, solidaria y espiritual? Ante One Human Minute, uno se siente abrumado, son demasiados datos los que puede dar la humanidad en tan sólo un minuto.  Dice Lem que hay menos formas de ayudar a los demás, que de perjudicarles. Que nuestro mundo, ese que hemos construído, está más cerca del infierno con todos sus datos que del cielo. Esta parte se torna denuncia; de lo que somos, de lo que hemos construído, de lo que somos incapaces de ver. Los datos pasan a ser irrelevantes; lo necesario es el hombre, la persona, el individuo; esa responsabilidad que hay detrás de cada acto, de cada dato, de cada minuto humano.


ONE por SFLTV  Based on the essay One Human Minute by Stanislaw Lem.

(...)

Stanislaw Lem  transmite angustia,  congoja, incomprensión e impotencia. Vapulea inmisericorde nuestro cerebro. Mientras leía esos minutos de humanidad, esa explicación al holocausto, me decía a mí misma que todo es producto de nuestra libertad; que somos responsables del sufrimiento, de la aniquilación, de la negación del sufrimiento en los otros, que lo somos en razón de nuestra responsabilidad inmóvil. De nuestro no querer mirar, no querer observar y no querer actuar.

No hay comprensión para las acciones del hombre; su alma atroz, su alma cruel e insolidaria es inabordable. El ser humano, que sabiéndose extraordinario es capaz de convertirse libremente en la más auténtica de las bestias, nos sobrecoge. Y mientras leo, pienso en esa libertad, que está para mirar el pasado y aprenderlo, para analizar el presente y contarlo, para evitar que se repita de nuevo el abismo que podemos llegar a ser como especie. Esa libertad que puede redimir de su sinsentido al hombre. El llamado ser humano, esa especie animal que presumiendo de raciocinio, tiene en su haber episodios lamentables que jamás deberían haber sido, pero también posee, la capacidad de asimilar la lección que el pasado siempre da para no volver a repetirlo.

En nuestras manos está la libertad; el poner o no el grito en el cielo, el echarse o no  las manos a  la cabeza, el hacer algo o no, no hacer nada. Ante nuestros ojos, los sentimientos, la irracionalidad, las incontables experiencias imposibles de comprender, y a pesar de todo, la necesaria libertad. El dominio de nuestros actos, la responsabilidad siempre activa de ser persona. Si ser humano no significa únicamente inteligencia y voluntad, sino que además significa sentimientos desencontrados, irracionales y deshumanizados; ser humano también significa amor, responsabilidad y solidaridad. En cada instante soy el único responsable de saber qué hay detrás de cada uno de los minutos de mi vida; del minuto en que amé y del minuto en que odié. 


"El hombre ha salido a explorar otros mundo y otras civilizaciones
sin haber explorado su propio laberinto de pasajes oscuros y cámaras secretas, 
sin encontrar lo que yace detrás de las puertas que él mismo ha sellado".



Solaris, año 2002,  dirigida por Steven Soderbergh. Basado en la novela de Stanisław Lem y en la película de 1972 dirigida por Andréi Tarkovski.


ESTILO Y CLARIDAD EN LA BLOGOSFERA.


La comunicación tiene una cuestión de base que hoy se ve sujeta a una gran revolución;  el medio. Si el emisor y el receptor vienen a mantenerse en un  rol más o menos estable, el medio se ve diversificado de tal manera, que mantener un lenguaje y un estilo afín al medio llega a ser un verdadero reto.

Esto sucede por ejemplo en la aldea global; es necesario un manual de estilo para la comunicación en las webs y redes sociales. Lo habitual es que nos lancemos sobre ello sin tener una idea clara del marco que las diseñe. Quien más y quien menos, al entrar en el mundo de la comunicación por interntet, lo ha hecho desde su propia iniciativa; experimentando un día y otro sin tener previamente ningún conocimiento sobre el lenguaje, el estilo o la visión de una estructura que globalice la forma de sus textos, la unifique y le de una apariencia determinada. Y mira por donde que he descubierto un mundo interesante; una orientación sobre el estilo y las coordenadas necesarias para escribir correctamente en un blog.

Las normas de publicación en internet son un reto. Están por definir el modo y la estructura de toda esta información accesible y rápida que es la blogosfera. Las nuevas tecnologías en la comunicación son el futuro, y no tardarán en sentirse necesitadas de un guía concreta que les de dinamismo, estilo y mayor comprensión. Hoy, la libertad de expresión es un hecho. La forma, poco a poco se irá determinando; aún sigue siendo algo experimental.

Navegando por internet con estas cosas en la cabeza me encontré una página muy prácitca. Os invito a que la echéis un ojo. Creo que no os decepcionará. No deja de ser una ayuda inestimable la orientación de cómo enfocar tu página web, cómo estrucuturar su contenido, cómo hacer eficaz la presentación de tu empresa o adquirir la capacidad para atraer con una entrada sin llegar al estenuamiento del lector A mí, visto lo visto,  me queda demasiado por aprender.

También quiero mencionar esta entrada sobre la gramática del Twitter, me ha resultado de lo más explícita.  La claridad es lo primero que se pierde cuando hay mucho que expresar y poco espacio en el que meterlo, así que escribir claro  por estos lares, para mí será todo un reto. Jackob Nielsen, hace mención de tres directrices  básicas para ser un eficaz comunicador en soportes digitales; ser breve, ser claro y aprender a utilizar el hipertexto. Está claro que a mí, visto lo visto, me queda aún mucho que aprender, practicar y conseguir.